Conozca más sobre la plantación del olivo
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Cómo es la plantación del olivo
Cada día crece más el interés estético que despiertan los olivos en la jardinería. Su aspecto, sus hojas perennes, su tronco y ramas robustas y su historia, hacen que el olivo milenario se convierta en un ejemplar ornamental muy deseado por muchos.
A excepción de algunas especies de olivos, estos árboles se reproducen de forma vegetativa, a través del uso de zuecas o estacas con las que se les ayuda a lograr el enraizamiento de forma fácil, en el mismo terreno donde se realiza el asentamiento.
La plantación por estacas es una de las prácticas que más frecuentemente se utiliza con el fin de reproducir plantas o árboles que copien fielmente las características de su progenitor y de esta manera lograr conservar esas características fundamentales a lo largo del tiempo.
Sin embargo, este es un procedimiento lento, por lo que, en la jardinería, se suelen emplear estacas enraizadas en vivero dentro de contenedores, logrando que en pocos años consigamos arboles de grandes, con un tamaño parecido al de cualquier tipo de árbol frutal.
Actualmente, cuando hablamos en jardinería de plantación de olivos ornamentales, muchas veces nos referimos a la plantación de olivos adultos, y que cuanto más viejos sean, mejor. Esto se debe a que, en los primeros años de vida, el olivo se caracteriza por ser un árbol endeble e insignificante. A partir de su segunda década, su tronco y ramas comienzan a ganar robustez de modo que comienza a ganar atractivo.
Esta característica hace que se prefieran olivos viejos como arboles ornamentales, con un tronco amplio y con patas más gruesas para dar fuerza y mayor belleza al jardín.
Preparación del olivo ornamental
Los viveros que se dedican a preparar olivos adultos para la jardinería como árboles ornamentales, se encargan de realizar la poda severa de su copa, con el fin de reducirla, al menos, a la mitad de su volumen. Gracias a esta poda, se logra alcanzar el equilibrio necesario tras la inevitable perdida de raíces que se produce con el consiguiente trasplante.
El siguiente paso de los viveros que se dedican a preparar los olivos ornamentales es sacar el árbol del suelo en el que se encuentra. Para ello es necesario abrir una zanja alrededor del árbol que permita extraerlo con facilidad, acompañado de un cepellón del mayor tamaño posible.
Este es un proceso complicado en el que es necesario el uso de una grúa especial que esté dotada de pluma de suspensión y cucharas abrazadoras que permitan acoplarse al cepellón para elevar el olivo en forma vertical hasta colocarlo en el camión que lo transportará.
Por lo general, se transportan entre 5 y 10 olivos, con sus respectivos cepellones de acuerdo al tamaño del camión. Una vez que los olivos llegan al vivero, sus cepellones son estratificados en arena con la finalidad de propiciar la regeneración de las raíces que se pierden a consecuencia del arranque y para hacer más fácil el posterior proceso de trasplante en el jardín.
En los casos en los que el olivo no es lo suficientemente voluminoso, se procede a escayolar su cepellón. De esta forma, no será necesario reducir demasiado la copa mediante la poda. Sin embargo, es necesario tener en cuenta que cuando se realice su plantación habrá que retirar la escayola del cepellón para permitir que el sistema radicular se pueda expandir sin tener ningún tipo de limitación.
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